-Me
acostaré un rato sobre esta cama de piedras. Por favor hábleme
mientras trato de conciliar el sueño.
-Si
mira al horizonte, el mar yace sobre un escalón de arena plana. A su
lado, la luz del cálido atardecer descubre un acantilado de roca
fina que amenaza intrusivo al agua. Hay una mesa maciza en la playa.
Encima de ella, un arbolillo inerte perturba el paisaje mientras el
tiempo se deshace en una de sus ramas. Bajo su sombra descansa usted
arropado por el tiempo deshecho en su frente. De mi brújula en la
mesa brotan insectos y devoran su rumbo, además, el tiempo está
deshaciéndose en el borde del mueble. Eso sucede cuando mira hacia
adelante.
-
¿Qué ocurre si miro hacia atrás?
-
El tiempo endurece y se queda aquí atrapado.
-
Cerraré los ojos entonces.
-
Bien pues, experimentará la persistencia de la memoria.
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